jueves, 6 de septiembre de 2012

Estrella Fugaz

En su primer partido en la profesional, días antes de cumplir los dieciocho años, hizo tres goles: uno de derecha, uno de izquierda y uno de cabeza. Un bonito hat trick, sin duda, que se convirtió ineludiblemente en noticia de primera plana.

Pero en el siguiente partido, ya mayor de edad, una fortísima entrada de un rústico defensa cuyas verdaderas intenciones nunca sabremos le quebró la tibia y el peroné de la pierna derecha; así llegó el inesperado final de su carrera futbolística y el forzoso inicio de la universitaria.

Pasado el tiempo, recuerda con cierta nostalgia, aunque sin amargura, sus partidos en primera división. Lo que más le dolió, y le duele hasta ahora, es que el canillita no lo reconociera el día que salió en portada y le compró todos los diarios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario